06 Oct Se abre en Tucumán la Causa de Beatificación del P. Martín
El Sr. Arzobispo de Tucumán, D. Carlos Sánchez, ha presidido la primera sesión de la fase diocesana de la Causa del P. Martín, sacerdote operario diocesano, que falleció en 2011 rodeado de una gran fama de santidad entre los fieles de Tucumán.
La apertura de la fase diocesana de la Causa de Beatificación y Canonización del Siervo de Dios Martín Martín Martín-Tereso ha tenido lugar el 5 de octubre de 2022 en el Arzobispado de Tucumán (Argentina). Después de una oración al Espíritu Santo el Postulador general de la Hermandad, D. Carlos Comendador, explicó a los presentes el sentido del acto y recordó que el objeto de la fase diocesana “recoger todas las pruebas documentales y testimoniales para alcanzar la certeza moral acerca de las virtudes heroicas del P. Martín”. A continuación, se procedió a la lectura de la Petición de la apertura del proceso de Canonización del P. Martín y del “Nihil Obstat” proveniente de la Santa Sede.
Seguidamente fue constituido el tribunal para la Causa formado por el Delegado Episcopal, Pbro. Dr. Jorge Martín Blunda Grubert, el Promotor de Justicia, Dr. Alberto José Brito, el Notario Actuario, Prof. Aldo Fabián Sánchez, la Notaria Adjunta, Prof. Mirta Noemí Mendoza, que prestaron juramento.
Participaron en el acto Mons. Roberto Ferrari, Sr. Obispo Auxiliar, D. Florencio Abajo, Director general de la Hermandad a la que pertenecía el P. Martín, los sacerdotes de la Parroquia de Montserrat, representantes de la Parroquia y del Colegio de Montserrat y de la Fundación P. Martín Martín Martín, y otras personas que le conocieron.
Antes de finalizar el acto el Sr. Arzobispo comentó el valor que tiene para la Arquidiócesis la apertura de la causa del P. Martín que se santificó por las calles de Tucumán. Por su parte el Director general de la Hermandad dio las gracias dio las gracias a Dios por la santidad encarnada en la figura del P. Martín.
Finalmente, el Postulador general explicó el sentido de la oración por la pronta beatificación del P. Martín que aparece en las estampas que se distribuyeron a la salida del acto.
Breve biografía del P. Martín
El Siervo de Dios Martín Martín Martín-Tereso nació en Sonseca (España) el 11 de noviembre de 1923. Después de estudiar en el Seminario de Toledo ingresó en la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazón de Jesús con el deseo de vivir la santidad sacerdotal. Fue ordenado sacerdote el 11 de junio de 1949 y realizó su primera consagración a la Hermandad el 16 de julio del mismo año.
A lo largo de treinta y siete años ejerció su ministerio como formador en diversos seminarios: Sanlúcar de Barrameda (España), Segovia (España), Florida (Uruguay), Petrópolis (Brasil) y Tucumán (Argentina). Asumió diversas y variadas responsabilidades, tales como prefecto, profesor, director espiritual, administrador y vicerrector. Disfrutaba de manera particular como director espiritual y se caracterizó por ser un formador que predicaba con el ejemplo.
Durante ocho años vivió en Buenos Aires dedicándose a diversos ministerios, colaborando en algunas parroquias y acompañando a varios grupos y movimientos como Acción católica, Movimiento familiar cristiano, Cursillos de Cristiandad, Obra Manuel Domingo y Sol, etc.
Desarrolló su ministerio sacerdotal como vicario parroquial en la Parroquia de Ntra. Sra. de Montserrat en Tucumán durante los últimos diecinueve años de su vida. Se entregó totalmente a la atención espiritual de los fieles y, de manera particular, a los enfermos. Sus ministerios fueron también muy variados: Servicio sacerdotal de urgencias, asesor y asistente espiritual de grupos de matrimonios y del Movimiento familiar cristiano, colaborador en Cursillos de Cristiandad, Cursillos de novios, Acción Católica, Movimiento Puente y Movimiento Círculos de Juventud. Así mismo acudía a la Cárcel de mujeres, al Convento de las Carmelitas descalzas, a la Comunidad de las Hermanas del Huerto y era capellán del Instituto de Orientación Juvenil Buen Pastor colaborando también en otros colegios parroquiales.
El Siervo de Dios se caracterizó en todo momento por ofrecer su tiempo a los demás como signo de la entrega total de su vida. Afirmaba que “trabajar para Dios no tiene horario” y por ello se multiplicaba para responder a todas las llamadas que recibía.
La fuente de su ministerio sacerdotal era la oración, la adoración a Jesús Sacramentado y una profunda espiritualidad mariana, que compartía con los fieles a través de rosarios y denarios que elaboraba él mismo.
El amor de la ciudad de Tucumán
La ciudad de Tucumán y sus gentes lo han querido desde siempre. Y así lo expresa el hecho de que el 6 de noviembre de 2006 fuera nombrado “Mayor notable de Tucumán” por la Honorable Legislatura de Tucumán. “El Padre Martín es conocido por su permanente actitud solidaria con los enfermos, visitando los hospitales públicos para llevar alivio y una palabra de aliento para los pacientes, familiares y deudos. Su modestia, humildad y vida comprometida con la pobreza ha dado sobradas muestras de servicio y entrega para con nuestra Provincia, mereciendo el reconocimiento de todos nosotros”, rezaba la resolución del Poder Legislativo tucumano.
El 25 de junio de 2021 se le dedicó una rotonda ubicada en la intercesión de las calles Ecuador y Estado de Israel.
Goza de una fama de santidad auténtica y bien difundida en una porción muy significativa del Pueblo de Dios, especialmente en la Archidiócesis de Tucumán, donde vivió y ejerció su sacerdocio durante cuarenta y cinco años. Desde el momento de su muerte numerosos testimonios espontáneos sobre su santidad lo reconocían como “un santo en vida”.