Nuestra Señora de la Vocación, una advocación mariana promovida por la Hermandad

Nuestra Señora de la Vocación, una advocación mariana promovida por la Hermandad

Este domingo, 14 de mayo, se cumplen 40 años desde que el entonces arzobispo de Valencia, Mons. Miguel Roca, bendijera la imagen de Nuestra Señora de la Vocación en el Templo de Santa Catalina Mártir, en Valencia. Unos meses antes, esta imagen había presidido un multitudinario encuentro del Papa San Juan Pablo II con sacerdotes y seminaristas de toda España. Hablamos con el actual rector del templo eucarístico, el operario D. José Benito Gallego, para acercarnos a la historia de esta curiosa advocación.

¿Cómo surge la advocación de Nuestra Señora de la Vocación?

La historia de esta advocación tiene su origen en la Parroquia de San Cristóbal de Majadahonda (Madrid). Al poco de erigirse esta nueva parroquia, en la década de los setenta del siglo pasado, los sacerdotes operarios que estaban al frente querían poner una imagen de la Virgen en el templo.

Por aquel entonces, estaba de párroco don Eugenio Fuertes, y su deseo era que esta imagen de la Virgen tuviera una advocación “que indicara personalidad y espiritualidad propia”, y no otra advocación como pudiera ser la del Carmen o la Inmaculada, que ya es patrona de la Hermandad.

¿Y qué se le ocurrió?

El propio D. Eugenio, impulsor de esta advocación, dijo: “Yo llevaba en el pensamiento, desde hacía tiempo, la idea de la Virgen de la Vocación, tan evangélica y tan operaria”. Para ello, consultó a Roma si se admitiría este título. Desde allí le responde el operario don Teodoro del Arroyo diciendo que “en Roma no ponían dificultad ninguna con tal de que el propio obispo no pusiera tampoco reparos”.

Después había que ejecutar la idea…

La idea de esta advocación mariana siguió su curso hasta llegar al escultor, don Juan Manuel Martín Munuera. Este hizo un boceto inicial de la nueva imagen de la Virgen que posteriormente el párroco presentó a los fieles. No quedaron satisfechos del todo. “Se le encargó otro boceto al mismo escultor, y sin que se le dijese ninguna otra cosa, presentó el nuevo boceto con la concavidad en el seno, sobre la cual no se consultó más. En esa concavidad se podía colocar un sol o algo parecido. Por fin quedamos en no poner nada para darle fundamento a esa filosofía de que la vocación pide vacío de sí mismo, disponibilidad, estar incompleto precisamente para que la Vocación sea lo que a uno le completa”.

La imagen se colocó a la derecha del altar en el templo de San Cristóbal de Majadahonda, hoy Parroquia del Beato Manuel. Y es en esta Parroquia, en la capilla que lleva su nombre, donde se puede venerar actualmente.

Un tiempo después de esta primera imagen, se encargaría otra para Valencia…

El 28 de septiembre de 1981 llega a Valencia como rector del templo eucarístico de Santa Catalina Mártir don Eugenio Fuertes. En esta época, cuando aún persistían las obras de restauración, la iglesia de Santa Catalina contaba con “cinco o seis hermosas y amplias capillas” en la parte de la girola. Lo primero que pensó el nuevo rector fue en “dedicar una de ellas a la Virgen de la Vocación”. Otra de esas capillas, la más inmediata, “quedaría reservada para colocar la imagen del Beato Manuel Domingo y Sol, cuando fuese beatificado”, acontecimiento que felizmente llegaría unos años más tarde. Actualmente, las dos capillas “forman una zona vocacional en este hermoso templo que rige la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos”.

Al tener experiencia artística y visual de la Virgen de la Vocación, que don Eugenio dejó instalada en su anterior parroquia de Majadahonda (Madrid), él mismo quiso corregir algunos detalles a fin de no repetirlos en la nueva imagen para Santa Catalina. Aquella primera estaba bien tallada, conservando el color natural de la madera, “pero resultan sus rasgos algo duros; especialmente se desearía que fuesen más suaves las facciones de la cara”.

Con todo, en la Pascua de Pentecostés de 1982, el 30 de mayo, don Eugenio contacta con el arquitecto don Luis Gay Ramos, alma y artífice de las obras de restauración de la Iglesia de Santa Catalina. Le expone su idea acerca de la nueva imagen, a lo que don Luis le responde recomendándole que “hable con don Bartolomé Carabal García”, en ese momento decorador y restaurador.

El 21 de junio se formaliza el encargo de la Virgen de la Vocación. Siguiendo las indicaciones de don Eugenio para la nueva imagen “con los rasgos, especialmente los faciales, más suaves y más dulces, y la oquedad del seno más alta, quedando más que en la zona visceral en la cordial”, realizará esta obra el artista imaginero don Manuel Biot Rodrigo.

¿Qué rasgos singulares tiene esta imagen?

Sin duda, el más singular es el círculo rebajado del seno, entre el corazón y el vientre. Es expresión del vacío interior de uno mismo y de la propia voluntad para aceptar la llamada Dios y responderle en total disponibilidad. Así lo expresó María con sus palabras: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mi según tu palabra» (Lc. 1,38).

Sus manos, suavemente tendidas en actitud de entrega y de acogida maternal, expresan que por ellas pasa la gracia de la Vocación, y a ellas puede acudir confiado el que, después de haberla recibido, necesita un apoyo para serle fiel.

También llama la atención que ese círculo rebajado es la única parte policromada de esta imagen.Efectivamente, esa concavidad de la Virgen de la Vocación está decorada en oro fino, a diferencia del resto de la escultura, donde se aprecia la madera y su color natural. Según la escultura y pintora valenciana en arte religioso, Lirios Domenech Bardisa, “este dorado, en concreto, es portador de un lenguaje místico y trascendente. El hombre, desde sus orígenes ha admirado la dorada luz del sol, presumiendo que provenía de la Divinidad, pues en la naturaleza no es posible encontrar este color. Por tanto, el color dorado del círculo rebajado se logró aplicando hojas de oro de forma bruñida hasta lograr su máximo brillo. Nos recuerda a la tradición de la iconografía cristiana antigua donde el dorado representa la luz de Dios. Sin duda que es la expresión más hermosa para contemplar a María como Madre de Dios, llena de esa luz Divina. La disposición de la Virgen, que acoge la proximidad de Dios aceptando su plan divino, así lo requiere”.

¿Se sabe qué reacción suscitó la imagen en el Papa San Juan Pablo II?

Cuando don Eugenio deja encargada la Virgen de la Vocación para Santa Catalina de Valencia, comenta que “tiene que estar acabada para la venida del Papa”. Efectivamente, en 1982, el Papa San Juan Pablo II visitó España, hace ahora cuarenta años. Y estaba previsto que visitara Valencia, así como el Seminario Mayor de Moncada, donde el Papa recibiría a todos los sacerdotes de España. El deseo de nuestro operario era que el mismo Papa, en el transcurso de este encuentro, bendijera esta imagen.

El 8 de noviembre de 1982 el Papa San Juan Pablo II visitó Valencia. En el paseo de la Alameda, ordenó a 141 sacerdotes. Después fue el encuentro con más de cinco mil sacerdotes y seminaristas de toda España en el Seminario Mayor de Moncada. “Resultó impresionante, pero no pudo ser tan detenido porque el Papa tuvo que ausentarse para visitar Alzira, en donde habían tenido lugar las catastróficas inundaciones”, relata don Eugenio.

Es cierto que la Virgen de la Vocación presidió el acto desde el lado derecho de la Capilla, “bajo el hermoso dosel rojo que se le había preparado”. Pero también es veraz que el Papa “no la bendijo por no tener tiempo”, pues al conocer los duros acontecimientos por las recientes inundaciones, debido a la rotura de la presa de Tous, acortó su visita en Moncada para estar junto a los miles de afectados.

¿Qué actos hay previstos para celebrar el 40º aniversario de la bendición de la imagen?

El 10 de febrero de 1983 fue cuando se colocó en su ubicación actual, en la parte de la girola del templo. Está anclada a la pared y “sin peana ninguna, como en el aire”. No obstante, la bendición de la imagen de la Virgen de la Vocación e inauguración de su capilla en la Iglesia de Santa Catalina Mártir fue el 14 de mayo de 1983, hace ahora cuarenta años. Al acto acudieron religiosas, sacerdotes, operarios de Santa Catalina, operarios y alumnos del Colegio Pío XII que participaron en la liturgia, el rector del Seminario Mayor y el señor Arzobispo, Monseñor D. Miguel Roca Cabanellas. “Resultó muy solemne”.

Aprovechando este 40º aniversario, durante el mes de mayo se han previsto diversos actos conmemorativos. Desde un concierto de música sacra con interpretaciones de piezas marianas, el rezo del Rosario Vocacional durante todas las tardes, la renovación del panel explicativo de esta advocación en la capilla donde se halla la imagen de la Virgen de la Vocación, la hora santa vocacional con la comunidad de Abraham, hasta la celebración de una Misa por las vocaciones el último domingo del mes de mayo, cuando tradicionalmente se celebra en Valencia esta festividad.

También, el grupo de jóvenes del proyecto de primer anuncio Piedras Vivas que ha nacido este año en Santa Catalina tendrá un encuentro con la artista católica Lirios Domenech para profundizar en “cómo la sacralidad de esta imagen implica la vida interior de la artista”. Y ofrecerán un servicio de visitas guiadas a visitantes y turistas explicando la originalidad de esta imagen, así como la contemplación creyente.

Para la Hermandad es una advocación conocida. ¿Despierta también devoción entre los feligreses de Santa Catalina?

Efectivamente, tras su inauguración y bendición, “en Valencia se le va teniendo considerable devoción, pues se ven frecuentemente ante ella jóvenes”, escribió don Eugenio. Y así ha sido durante estas cuatro décadas.

Gracias a la inspiración de este operario, se trata de una imagen de la Virgen María que llama la atención a todos los que pasan por nuestra Iglesia, en pleno corazón de la ciudad de Valencia. Aunque ya ha quedado patente que esta iconografía mariana, “la primera de esta advocación en toda la Iglesia”, ya nos resulta familiar, pues está en un templo eucarístico en el que trabajan los operarios.

Además de la reparación eucarística, lo específico de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos del Corazón de Jesús es su trabajo al servicio de todas las vocaciones y la juventud. Por tanto, es la impulsora de esta advocación mariana promoviendo su devoción, especialmente entre los jóvenes, pues ellos están llamados a tomar decisiones vocacionales en sus vidas.

Pero no sólo en Valencia. Ya hay tallas de Nuestra Señora de la Vocación en otros sitios…

Pero esta devoción ha ido más allá. Antes de su fallecimiento, tres años después de haberla tallado, el imaginero don Manuel Biot pudo hacer dos copias más: una para las Hermanitas de los Pobres de Reus (Tarragona) y otra para el Aspirantado Maestro Ávila de Salamanca, donde se forman los futuros sacerdotes operarios en España. Más tarde se realizaron otras copias, por autores distintos, para los Institutos de Pastoral Vocacional de México y Buenos Aires (Argentina). Actualmente hay otra copia en la residencia Mosén Sol de Alquerías (Castellón) donde se acoge y acompaña a sacerdotes.

Otro ejemplo reciente lo encontramos en la anterior Jornada Mundial de la Juventud 2019 en Panamá. Concretamente en la Feria de la Vocación. Allí, la Hermandad creó y ofreció un espacio vocacional para poner en práctica lo que sabe hacer. Y en el centro de todo se hallaba una réplica de nuestra señora de la Vocación.

Los jóvenes pudieron palpar cómo lo característico de esta imagen es el círculo rebajado del seno, entre el corazón y el vientre. Sentir la expresión del vacío interior de uno mismo y de la propia voluntad para aceptar la llamada de Dios, y responderle en total disponibilidad. Y orar lo mismo que María expresó con sus palabras: «He aquí la esclava del Señor, hágase en mi según tu palabra» (Evangelio según san Lucas 1,38).

SAN JUAN PABLO II Y NTRA. SRA. DE LA VOCACIÓN