Clausura del proceso diocesano en Tucumán de la Causa de beatificación del Padre Martín Martín Martín-Tereso

Clausura del proceso diocesano en Tucumán de la Causa de beatificación del Padre Martín Martín Martín-Tereso

Tucumán vivió una jornada histórica con la clausura del proceso diocesano de la Causa de beatificación del sacerdote operario Martín Martín Martín-Tereso este jueves, 19 de junio, coincidiendo con la celebración del Corpus Christi en su originaria archidiócesis de Toledo.

En los procesos de beatificación y canonización, que a menudo parecen ser demasiado lentos, se valora enormemente cualquier avance que se realice. El jueves 19 de junio de 2025, la Causa del Siervo de Dios Martín Martín Martín-Tereso, sacerdote operario diocesano, dio un paso fundamental con la clausura del proceso diocesano.

El acto tuvo lugar a las 11:30 en el Seminario Mayor y estuvo presidido por el arzobispo de Tucumán, Mons. Carlos Sánchez. Por la tarde, se celebró en la iglesia catedral una eucaristía de acción de gracias.

Terminada la sesión, las actas son enviadas directamente al Dicasterio de las Causas de los Santos, donde comenzará la siguiente etapa del proceso canónico, la conocida como “fase romana”.

La sesión de clausura

El acto de clausura comenzó con unas palabras de bienvenida por parte de D. Ariel Zottola, delegado del director general de la Hermandad de Sacerdotes Operarios Diocesanos en el Cono Sur. Después de agradecer al arzobispo el haber instruido el proceso diocesano, recordó la importancia y el sentido de la celebración que iba a comenzar. Comentó, además, los apoyos que hicieron posible el ministerio del P. Martín: el equipo de operarios, la implicación de muchos laicos y una profunda vida espiritual.

El vicepostulador de la causa, el P. Marcelo Lorca, compartió una breve semblanza del Siervo de Dios, poniendo el énfasis en la experiencia de martirio que vivió durante la persecución religiosa en España siendo joven seminarista. Todo su ministerio fue una manera de dar su vida por Cristo.

De este modo comenzó la sesión de clausura del proceso diocesano, presidida por el arzobispo, en la que estuvieron presentes los miembros del tribunal que han instruido la Causa: el delegado episcopal, P. Jorge Blunda; el promotor de Justicia, Dr. Alberto José Brito; y el notario, Fabián Sánchez.

Una vez que el arzobispo declaró concluida la investigación realizada, se procedió al momento más significativo del acto, cuando se cierran, sellan y lacran las cajas que contienen toda la documentación recopilada durante la investigación diocesana: testimonios y documentos sobre la vida y virtudes heroicas del Padre Martín, y su fama de santidad y de signos.

Posteriormente, los miembros del tribunal realizaron el juramento de haber realizado diligentemente su trabajo. El postulador de la Causa, D. Carlos Comendador, habiendo sido nombrado “portador”, también prestó el juramento de hacer llegar toda la documentación al Dicasterio para las Causas de los Santos en Roma.

Al término del acto, el postulador general de la Hermandad agradeció al arzobispo y al tribunal diocesano el haber hecho posible la realización del proceso diocesano. Señaló el hecho de que la sesión de clausura se celebrara en el Seminario Mayor, lugar donde trabajó muchos años el P. Martín en la formación sacerdotal, y en el jueves del Corpus Christi, pues él falleció la víspera del Corpus de 2011.

Por su parte, el arzobispo recordó que el P. Martín fue su formador en el seminario y que, en la visita ad límina del 2018, le habló al papa Francisco de la fama de santidad del P. Martín, y que este le respondió animándole a iniciar la causa porque hacían falta modelos de sacerdotes compasivos y misericordiosos. De este modo, con la bendición final, concluyó el acto.

Eucaristía de acción de gracias

Por la tarde, el arzobispo de Tucumán presidió en la iglesia catedral una eucaristía de acción de gracias por la clausura del proceso diocesano de la causa de beatificación del P. Martín. Acudieron muchos fieles de la parroquia de Ntra. Sra. de Montserrat, donde fue vicario los últimos dieciocho años de su vida.

En la homilía, el postulador, D. Carlos Comendador, reflexionó sobre el significado que tiene para la arquidiócesis el haber concluido un proceso sobre una causa de beatificación. “El P. Martín se santificó en Tucumán”, dijo, e invitó a todos a seguir su ejemplo caminando hacia la santidad.

El proceso diocesano

La sesión de clausura marca el fin de la investigación instruida por la Arquidiócesis de Tucumán, que comenzó el 5 de octubre de 2022. Es un paso importante en el camino hacia la santidad, con el que la Iglesia busca confirmar que la persona propuesta, en este caso el P. Martín, es un modelo de vida para los fieles y un intercesor ante Dios.

Para ello, en primer lugar, el azobispo nombró en junio de 2022 una comisión histórica para revisar los archivos donde se pudiera encontrar documentación relativa al P. Martín. Esta comisión estaba formada por la Dra. Silvina Daniela Roselli, doctora en Historia por la Universidad del Salvador (CABA); el P. Lope Rubio Parrado, doctor en Teología y sacerdote operario diocesano; y el P. Miguel Ángel Dionisio Vivas, doctor en Historia y autor de la biografía del P. Martín, ‘El santo de la bicicleta’. Su trabajo ha servido, por ejemplo, para descubrir algunos aspectos de su vida de seminarista y de sacerdote antes de que llegara a Argentina.

En segundo lugar, se han escuchado los testimonios de más de cincuenta testigos. Entre ellos, han declarado personas que le han conocido en Buenos Aires y algunos familiares y vecinos de su pueblo de Sonseca (Toledo) en España.

Se han incluido, además, testimonios sobre la vida del P. Martín que han ido llegando al arzobispado, a la parroquia Ntra. Sra. de Montserrat y a la Fundación Padre Martín Martín Martín durante estos años.

Etapas de una causa

El proceso de beatificación y canonización consta de varias etapas:

-Fase diocesana. Se inicia con la apertura del proceso y la investigación de la fama de santidad, vida, virtudes o martirio del Siervo de Dios.

-Fase romana. Una vez concluida la investigación diocesana, el expediente se envía a Roma para su análisis por parte del Dicasterio para las Causas de los Santos.

-Declaración de Venerable. Si el Dicasterio considera que existen pruebas suficientes de heroicidad de las virtudes o del martirio, se declara al Siervo de Dios como Venerable.

-Beatificación. Si se verifica un milagro atribuido a la intercesión del Venerable, la Iglesia Católica lo declara Beato, pudiendo ser venerado en una diócesis, región o en toda la Iglesia.

-Canonización. Se requiere otro milagro para que la Iglesia declare al Beato como Santo, pudiendo ser venerado universalmente.